Japón, conocido como país donde se degustan los alimentos desde su sabor natural, busca permanentemente el gusto por una tierna y delicada carne vacuna.

Nuestra industria ganadera se ha desarrollado con la finalidad de satisfacer siempre esta necesidad. El mundo se sorprende por la ternura y el colorido rojizo que se puede apreciar en el momento de comer nuestro Wagyu criado en Japón. El sabor inolvidable en el paladar de quien lo ha probado lo define como una delicada carne que supera el gusto de cualquier otra carne hasta el momento.

La escasez de Wagyu en el resto del mundo hace que se revalorice nuestro producto y a la vez potencia la posibilidad de elevar la calidad de la gastronomía de Japón generando grandes cambios.